La lucha contra la obesidad

El crecimiento de la obesidad a nivel mundial ha dejado alerta a la población. Fatiga, dificultades para dormir, falla respiratoria y motriz, son algunos de los problemas que padece una persona obesa. Para muchos la solución a la obesidad es cerrar la boca y dejar de comer, esto es un pensamiento erróneo. No es para nada fácil hacer un giro cuando el cuerpo se acostumbra a un estilo de vida, en este caso una mala forma de vivir que produce un lento deterioro.

Personas que han padecido esta enfermedad desde la infancia se acostumbran a vivir de esta manera, teniendo que soportar burlas y discriminación por parte de la sociedad. Cuando no se trata solo de unos kilos y se sufre de un grado serio de obesidad se dificulta afrontar la situación para buscar una salida. Existen cirugías como el conocido bypass gástrico –operación no estética que consiste en dividir el estómago en dos partes para que el paciente utilice solo la más pequeña y sienta saciedad comiendo menos cantidad- este método solo se utiliza en casos extremos, dónde la persona haya tenido varios intentos frustrados para adelgazar o este sufriendo serios problemas de salud por causa del sobrepeso. Pero si no se tienen las fuerzas necesarias para hacerlo ningún tratamiento tendrá efecto. A veces adelgazar se hace tan o mas difícil que dejar de fumar. Pues cuando ya se tiene a la comida como una adicción es muy difícil empezar a verla de otra manera y reconocer que se necesita un cambio para vivir mejor. En primera instancia la persona debe estar decidida y con mucha voluntad, tomar la responsabilidad de adelgazar y tener en cuenta que el cuerpo no es como una computadora a la cual se le puede llenar y vaciar el disco sin problemas, el cuerpo reacciona a cada cambio, por ello cuando se intenta perder peso hay que hacerlo como si fuera un proceso de recuperación, que lleva su tiempo, hay que tener constancia, tratar de evitar recaídas y poner mucha paciencia. Siempre es importante buscar ayuda, seguir los consejos de profesionales y prepararse mentalmente para que los resultados sean positivos.
Cuando económicamente no se puede hacer un tratamiento el problema se hace más grabe aun para el obeso, se pierden las esperanzas y se acepta la manera de vivir, que en muchos casos es postrado en una cama y con depresión. Además los servicios médicos en muchas ocasiones no quieren hacerse responsables del asunto ni implementar la indumentaria necesaria para atender a las personas con sobrepeso. Para tratar de ofrecer una solución, en muchas partes del mundo, principalmente en América, se esta tomando conciencia de las graves consecuencias que trae la obesidad. Se implementaron medidas como prohibir la venta de bebidas azucaradas y comida basura en los colegios por ejemplo. También existen organizaciones que ayudan a bajar de peso e informan a la gente acerca de cómo mantenerse y alimentarse correctamente, algunas son pagas y otras son gratuitas.
Como ya dijimos antes de empezar cualquier dieta o tratamiento es importante prepararse mentalmente, mirar hacia un futuro mejor y entender que no es solo una cuestión de estética sino de salud y para mejorar la calidad de vida. Querer es poder.

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