Sobre la cafeína: ¿Sabías que…

  • la cafeína no solo está presente en el café sino en muchas otras bebidas y hasta en medicamentos?
  • en las mujeres embarazadas el feto está sujeto a grandes cantidades de cafeína ya que esta llega rápidamente a él?
  • los niños muchas veces ingieren grandes cantidades de cafeína sin saberlo?
  • el té y el café reducen en gran manera la absorción del hierro y el calcio?
  • la cafeína produce una gran dependencia?

Por deliciosas que sean, siempre es mejor no abusar de muchas de las sustancias que ingerimos. Es el caso de la cafeína, es una bebida muy común y que muchos toman por placer, para sentirse más activos o para compartir un momento, pero no todos saben los efectos que produce en el organismo.

La cafeína es una droga que se encuentra presente en más de una bebida, se consume principalmente en forma de café pero se puede encontrar además en el té negro, algunas gaseosas o productos con chocolate. También se utiliza para muchos medicamentos contra la gripe, la alergia o dolores de cabeza.

Durante el embarazo, el feto se desarrolla y crece de acuerdo a los cuidados dados por su madre, consumir productos que contengan cafeína durante este período no es para nada aconsejable ya que una vez en el organismo  llega a la placenta y el feto la metaboliza muy lentamente. Estudios hechos en países cuya población consume grandes cantidades de esta droga mostraron que el 90 por ciento de las mujeres embarazadas que la ingerían terminaban en partos prematuros o teniendo bebés con muy bajo peso.

Esta sustancia es consumida por personas de todas las edades, un chico que toma una lata de refresco que la contenga, recibe el igual a cuatro tazas de café para un mayor. Algunos pediatras están en alerta ya que se ha relacionado directamente el consumo de cafeína en los niños con un comportamiento hiperactivo en los mismos.

Ya en el organismo, la cafeína es rápidamente absorbida y no tarda demasiado en llegar a la sangre. Una vez allí, aumenta los niveles de azúcar y grasa sanguínea, estimula el sistema nervioso central, hace irregular el ritmo cardíaco, produce insomnio y ansiedad y en muchas personas ocasiona temblores y nerviosismo.

No todos los productos contienen la misma cantidad de cafeína, una taza de café de máquina, por ejemplo, contiene el doble que una de café instantáneo. Las personas que son grandes consumidoras de té o café presentan en su organismo dificultades para la absorción del hierro y equilibrio del calcio, aumentando su eliminación mediante la orina. Además se asombran cuando notan lo difícil que les resulta dejarla, observando a las pocas horas de haberla ingerida, situaciones de ansiedad, cansancio y hasta dolor de cabeza. Si bien, estos síntomas desaparecen a la semana de haber logrado suprimirla o consumirla moderadamente, para muchos esto no es posible de conseguir ya que la cafeína es una droga que, como todas, produce adicción.

Lo recomendable es preferir bebidas naturales, como agua o jugos frutales. Si se es amante de las infusiones calientes, se puede elegir té de hierbas o café de cereales.

Como siempre, la decisión final depende de cada uno, pero también como siempre, lo ideal es un consumo responsable y unos hábitos de vida saludables.

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